Funcionamiento familiar y dependencia emocional en estudiantes de 5° de secundaria de un colegio de Lima Metropolitana, 2025

Abstract

La presente investigación tuvo como objetivo determinar la relación entre el funcionamiento familiar y la dependencia emocional en estudiantes de 5° de secundaria de un colegio estatal de Lima Metropolitana en el año 2025. Se empleó un enfoque cuantitativo, de tipo básica, no experimental, de corte transversal y nivel correlacional. La población fue censal, conformada por 100 estudiantes de ambos sexos, sin necesidad de delimitar una muestra. Se utilizaron el Inventario APGAR de Smilkstein para evaluar el funcionamiento familiar y el Cuestionario de Dependencia Emocional (CDE). Los resultados indicaron que el 50% de los estudiantes percibió un funcionamiento familiar regular y la dependencia emocional, el 55% presentó un nivel regular. Se encontró una correlación inversa significativa entre el funcionamiento familiar y la dependencia emocional (rho = -0.262; p = 0.005), lo que sugiere que un mejor funcionamiento familiar, caracterizado por cohesión, comunicación efectiva y apoyo emocional, se asoció con una menor presencia de dependencia emocional. Se concluyó que el entorno familiar funcional promovió la autonomía emocional, permitiendo a los adolescentes desarrollar relaciones interpersonales más equilibradas y reducir la necesidad de buscar validación afectiva externa, un aspecto crucial en una etapa de desarrollo marcada por la búsqueda de identidad.

This research aimed to determine the relationship between family functioning and emotional dependence in 5th-year secondary school students from a public school in Metropolitan Lima in 2025. A quantitative, basic, non-experimental, cross-sectional, and correlational approach was employed. The population was census-based, consisting of 100 students of both genders, with no need to define a sample. The Smilkstein APGAR Inventory was used to assess family functioning, and the Emotional Dependence Questionnaire (CDE) was applied to measure emotional dependence. Results indicated that 50% of the students perceived regular family functioning, while 55% exhibited a regular level of emotional dependence. A significant inverse correlation was found between family functioning and emotional dependence (rho = -0.262; p = 0.005), suggesting that better family functioning, characterized by cohesion, effective communication, and emotional support, was associated with lower levels of emotional dependence. It was concluded that a functional family environment promoted emotional autonomy, enabling adolescents to develop more balanced interpersonal relationships and reduce the need for external affective validation, a crucial aspect in a developmental stage marked by identity exploration.